Otro día de carretera

Hoy tuvimos un muy buen día de carretera. Hicimos lo que Andrew nos sugirió y nos fuimos por carreteras chiquitas en vez de por la interestatal desde Austin hasta Amarillo. Nos impresionó la cantidad de pueblitos en el camino (algunos de 295 habitantes). Esto me provocó imaginarme cómo es la vida de estas personas. ¿Qué hacen todos los días? ¿Están conscientes del mundo que los rodea? No nos paramos tanto, teníamos mucho que manejar y hacía mucho calor. Fuimos viendo cómo cambiaba el paisaje y tomamos buenas fotos de las diferencias. Mientras manejábamos tuve un poco la misma sensación que me da cuando buceo de que solo somos humanos, criaturas pequeñísimas en un mundo inmenso. Y supongo que esta sensación va a ir creciendo conforme nos vayamos acercando a los parques nacionales y veamos esas maravillas de la naturaleza. Llegamos a Amarillo temprano, fuimos al hotel, comimos y regresamos al hotel. Amarillo es una ciudad chiquita, nada espectacular o diferente. La ruta 66 pasa por aquí y mañana vamos a manejar un buen cacho por la misma. En el hotel estuve 2 horas tratando de planear los siguientes cuatro días. No es tarea fácil, y me da gusto haberlo hecho porque encontrar donde dormir en los parques se complicó un poco, sobretodo porque no fue con mucha anticipación. Parece ser que las personas planean este tipo de viajes años antes…pero ya está listo. Espero que todo salga bien, ¡estoy super emocionada!